15/7/08

Nubes

By LVI



2:28 hrs. Habitación desconocida, ajena, acogedora y curiosamente familiar.
Es 3 de julio del año 2008, tercer milenio, siglo XXI.
Edad: el siglo sin I y dos días.


El sueño le da empujones a este cuerpo y Satanás, que una vez lució como serpiente en el paraíso, hoy se ve como una almohada corriente y benditamente cómoda. "Descansa unos minutos", intenta negociar, pero mi álter ego me conoce demasiado y se niega a darme el permiso. "Tiene que estudiar", responde secamente, como un mediodía.

Aire frío peina mi espalda a tal grado que imagino a mis lunares escondiéndose; aliándose a las pecas de mis hombros en busca de calor. La luz y el hecho de estar sentada escribiendo en cierta posición me obligan a darle la espalda a mi sombra faldera que parece descansar pacíficamente sobre el colchón donde debería haber otro cuerpo que deseara ser mi sueño, mi cansancio, mi adicción y, en vez de ser las horas (días) sin dormir quienes me persigan, sea ése cuerpo, pues, el que me dé esos empujones hacia las nubes de plumas.