1/5/11

Partí de tus brazos.

Partí de tus brazos sin saber a dónde iba. El barco nos empequeñecía hasta hacernos desaparecer. Con temblor. Ahora no me reconozco. Sólo espero que de mí nazca otro hombre unido. Ojalá pudiera devolverte el resplandor que me entregaste. Te pertenece, pero estoy estancado, estancado como una piedra y no podré buscarte.

Rafael Cadenas

No hay comentarios: